El canto de una rana viene en la distancia, fluido en un suave viento y por primera vez presentándose como algo útil. Otra vez hubiera sido el absurdo pasajero del olvido, un sonido tan vano, tan lejano, tan vacío, ahora es lo único que tengo, su canto, el mortal silencio que rompe y mi cuerpo empapado en entumecimiento, flotando y asido a una muerte espesa, de barro que me traga y me deja solamente despedirme...oO